Situado en las alturas del Taunus, al noroeste de Bad Homburg, Saalburg fue en la época romana un fuerte con una aldea de campamento en el Limes. Hacia 1900, el emperador Guillermo II mandó reconstruir el fuerte, que entonces estaba en ruinas y se utilizaba como cantera, en gran parte fiel al original.

Hoy en día se pueden ver numerosos objetos en su interior: Vajillas, joyas, monedas, herramientas, esculturas, armas y mucho más. Junto con maquetas de edificios y paisajes, así como imágenes y textos, se ofrece a los visitantes una imagen realista de la vida cotidiana de los romanos en Germania.