Queridos huéspedes de la ciudad de Wiesbaden,

Mi lista de lugares favoritos de Wiesbaden es larga, pero justo en la cima se encuentra "Kochbrunnenplatz". Al fin y al cabo, este lugar es el corazón histórico de la ciudad balneario y del mundo balneario y, por tanto, el origen del desarrollo urbanístico de Wiesbaden.

Incluso el camino a mi lugar favorito por la Wilhelmstrasse, cariñosamente conocida como la "Rue" por los habitantes de Wiesbaden, me llena de expectación. Este magnífico paseo se caracteriza por la hermosa vista del "Warme Damm", el imponente Teatro Estatal y la vista, probablemente única, sobre el Bowling Green, con las hermosas fuentes en cascada, hasta la magnífica Kurhaus y las históricas columnatas.

La ruta pasa por tiendas exclusivas, la histórica Kaiser Friedrich Platz y el elegante hotel Nassauer Hof. Una vez en Kureck, sólo hay que dar un corto paseo por la Taunusstraße, que ya no es sólo el centro de exclusivos anticuarios, sino que también se ha convertido en un lugar de diversos destinos culinarios. Al llegar a Kochbrunnenplatz, me siento transportada al siglo XIX y me sumerjo en el ambiente de la antigua ciudad balneario cosmopolita de Wiesbaden.

Los telones de fondo de los antiguos Grand Hotels Rose y Palast Hotel en particular, así como la vista del Schwarzer Bock en la Kranzplatz, me transportan a una época dorada en la que Wiesbaden era apodada la "Niza del Norte". Cada una de estas casas tiene su propia historia y me gustaría invitarle a descubrirla en una de las muchas visitas guiadas que se ofrecen por la ciudad. Quizás le gustaría saber cómo Enrico Caruso cantó desde un balcón del Palasthotel en 1908 ante un entusiasta público del balneario o cómo el antiguo Grandhotel Rose se convirtió en la sede de la Cancillería del Estado de Hesse.

Lo más impresionante de todo es el histórico templo de la fuente, monumento conmemorativo del glamuroso establecimiento balneario "Kochbrunnen". De las 26 fuentes termales de Wiesbaden, la de Kochbrunnen es la más caliente, con una temperatura de casi 67 grados. A la ciudad balneario de Wiesbaden acudían bañistas y aficionados de todo el mundo.

El antiguo complejo balneario, construido por Wilhelm Bogler en 1888 al estilo del Alto Renacimiento italiano, constaba originalmente de un edificio portal, salas para beber y de paseo y el pabellón de primavera. La hermosa plaza sigue dominada por el majestuoso templo de la fuente y -a lo largo de la Saalgasse- la antigua Wandelhalle. Me gusta sentarme en el restaurante frente a la Wandelhalle y disfrutar de una deliciosa bebida mientras observo el colorido ajetreo de la plaza, donde hay mucho más que ver y experimentar.

Wiesbaden espera su visita.